Bienvenidos los curiosos y curiosas y todos aquellos que el destino de una u otra manera, los traiga aquí, los invito a recorrer este blog y hacer sus comentarios libremente.....

domingo, 30 de diciembre de 2012

Feliz Año 2013



Siempre acostumbro a dejar mensajes personalizados a mis amigas y asi lo seguire haciendo, sin embargo, navegando por internet me he encotrado con esta hermosa carta, que he querido compartir con ustedes…

Insisto, no es mio, estaba firmada por un tal Victor Hugo y lo unico que puedo decir al respecto es….Gracias!!!!

Mis de seos para este nuevo año:

Te deseo primero que ames y que amando, también seas amado. Y que, de no ser así, seas breve en olvidar y que después de olvidar, no guardes rencores. Deseo, pues, que no sea así, pero que si es, sepas ser sin desesperar.

Te deseo también que tengas amigos, y que, incluso malos e inconsecuentes, sean valientes y fieles, y que por lo menos haya uno en quien puedas confiar sin dudar.

Y porque la vida es así, te deseo también que tengas enemigos. Ni muchos ni pocos, en la medida exacta, para que, algunas veces, te cuestiones tus propias certezas. Y que entre ellos, haya por lo menos uno que sea justo, para que no te sientas demasiado seguro.

Te deseo además que seas útil, más no insustituible. Y que en los momentos malos, cuando no quede más nada, esa utilidad sea suficiente para mantenerte en pie.

Igualmente, te deseo que seas tolerante; no con los que se equivocan poco, porque eso es fácil, sino con los que se equivocan mucho e irremediablemente, y que haciendo buen uso de esa tolerancia, sirvas de ejemplo a otros.

...Te deseo por fin que, siendo hombre, tengas una buena mujer, y que siendo mujer, tengas un buen hombre   

Te deseo que siendo joven no madures demasiado de prisa, y que ya maduro, no insistas en rejuvenecer, y que siendo viejo no te dediques al desespero. Porque cada edad tiene su placer y su dolor y es necesario dejar que fluyan entre nosotros.

Te deseo de paso que seas triste. No todo el año, sino apenas un día. Pero que en ese día descubras que la risa diaria es buena, que la risa habitual es sosa y la risa constante es malsana.

Te deseo que descubras, con urgencia máxima, por encima y a pesar de todo, que existen, y que te rodean, seres oprimidos, tratados con injusticia y personas infelices.

Te deseo que acaricies un gato, alimentes a un pájaro y oigas a un jilguero erguir triunfante su canto matinal, porque de esta manera, te sentirás bien por nada.

Deseo también que plantes una semilla, por más minúscula que sea, y la acompañes en su crecimiento, para que descubras de cuántas vidas está hecha un árbol.

Te deseo, además, que tengas dinero, porque es necesario ser práctico. Y que por lo menos una vez por año pongas algo de ese dinero enfrente a ti y digas: "Esto es mío", sólo para que quede claro quién es el dueño de quién.

Te deseo también que ninguno de tus afectos muera, pero que si muere alguno, puedas llorar sin lamentarte y sufrir sin sentirte culpable.

Te deseo por fin que, siendo hombre, tengas una buena mujer, y que siendo mujer, tengas un buen hombre, mañana y al día siguiente, y que cuando estén exhaustos y sonrientes, aún sobre amor para recomenzar.

Si todas estas cosas llegaran a pasar, no tengo más nada que desearte.

jueves, 9 de agosto de 2012

El Principio







¿De donde venía yo cuando tú me encontraste?
-Preguntó el niño a su madre.
Ella llorando y riendo le respondió apretándole contra su pecho:
- Estabas escondido en mi corazón, como un anhelo, amor mío. Estabas en las muñecas de los juegos de mi infancia, y cuando, cada mañana, formaba yo la imagen de mi Dios con barro, a ti te hacía y te deshacía; estabas en el altar, con el Dios del hogar nuestro, y al adorarlo a El, te adoraba a ti; estabas en todas mis esperanzas, y en todos mis cariños.

Has vivido en mi vida y en la vida de mi madre, tu fuiste creado siglo tras siglo, en el seno del espíritu inmortal que rige nuestra casa.

Cuando mi corazón adolescente abría sus hojas, flotabas tú, igual que una fragancia, a su alrededor; tu tierna suavidad florecía luego en mi cuerpo joven como antes de salir el solla luz en el Oriente.

Primer amor del cielo, hermano de la luz del alba, bajaste al mundo en el río de la vida y al fin te paraste en mi corazón...

Qué misterioso temor me sobrecoge al mirarte a ti, hijo que siendo de todos, te has hecho mío,
¡Y qué miedo de perderte!
¡Así, bien apretado contra mi pecho! ¡Ay!
¿Qué poder mágico ha enredado el tesoro del mundo, a estos mis débiles brazos?

R. Tagore

lunes, 23 de julio de 2012

Jorge Luis Borges - El Mar



El mar. El joven mar. El mar de Ulises
Y el de aquel otro Ulises que la gente
Del Islam apodó famosamente
Es-Sindibad del Mar. El mar de grises
Olas de Erico el Rojo, alto en su proa.
Y el de aquel caballero que escribía
A la vez la epopeya y la elegía
De su patria, en la ciénaga de Goa.
El mar de Trafalgar. El que Inglaterra
Cantó a lo largo de su larga historia,
El arduo mar que ensangrentó de gloria
En el diario ejercicio de la guerra.
El incesante mar que en la serena
Mañana surca la infinita arena.




lunes, 5 de marzo de 2012

El Valor Del Tiempo





Para darse cuenta del valor de un año,
pregúntale a un estudiante que ha fallado en un examen final.
Para darse cuenta del valor de un mes,
pregúntale a una madre que ha dado a luz un bebe prematuro.
Para darse cuenta del valor de una semana,
pregúntale al editor de un diario semanal.
Para darse cuenta del valor de una hora,
pregúntale a los novios que esperan para verse.
Para darse cuenta del valor de un minuto,
pregúntale a una persona que ha perdido el tren, el autobus o el avión.
Para darse cuenta del valor de un segundo,
pregúntale a una persona que ha sobrevivido de un accidente.
Para darse cuenta del valor de un milisegundo,
pregúntale a una persona que ha ganado una medalla en las olimpiadas.

El tiempo no espera para ninguno.
Atesora cada momento que tengas.
Lo atesoras más cuando puedes compartirlo con alguien especial.